Has el espacio y el vendrá

«No es la meditación lo que detiene la mente. Es la rendición de la mente al alma, y del alma a la Verdad. Es cuando prefieres la palabra de la Verdad a la palabra de tu propio intelecto.» Yogi Bhajan

Hace tiempo hay algo que viene pulsando.

Preguntas que “curiosamente” he venido haciendo y escuchando en distintos espacios.

¿Qué siento? ¿Esto que hago, con quien me vinculo, tal o cual actividad resuenan en mi alma? ¿Cuál es mi propósito? ¿Que enciende mi alma? ¿Quién me obliga a sostener cuándo duele? ¿Para qué?

Hace meses que algo pulsa y pulsa, que jala; también hay otra parte que retiene haciendo fuerza contraria, como cuando tiramos o sostenemos una soga y con su rozamiento y fricción lastima.

Inicie el día con una práctica de meditación, sugerida en la #ComUnidad a la que pertenezco, guardianada por @pablomrobles; la meditación se llama Yo Soy. Al finalizar nos leyó un texto- Comentario de Yogi Bhajan- Extracto.

Un yogi cultiva la relación entre el sentido finito y el sentido infinito del Yo.

La mente a menudo se olvida de esta relación, cuando está apegada a una emoción en particular o a algún objeto que desea guardar.

Uno de los hábitos de un yogi, es crear la habilidad de romper este trance de apego, con un cambio hacia una perspectiva más amplia y universal.

Existías antes que tu apego y dependencia a los objetos, tu espíritu existiendo antes que el cuerpo que ahora utilizas.

Es muy poderoso y eficaz recordar en la mente, tu verdadera identidad con tu ser infinito, sin esta conciencia, filosofía, moralidad y espiritualidad, te limitarás a una participación ritual en lo bueno.

Lo que un yogi busca es participar en la vida con autenticidad y entusiasmo en lo verdadero, que es muy distinto de lo bueno.

Este mantra une las dos identidades de nosotros, finita e infinita.

El primer Yo Soy que pone énfasis en la parte YO, es personal y es el sentido finito del yo.

El segundo Yo Soy, pone el énfasis en la parte SOY, es impersonal y es el sentido trascendente del Yo…”

“…Si dices solo el primer Yo Soy, la mente intentará contestar ¿que soy yo? Esto envía la mente en una búsqueda por todas las categorías y papeles que guardan nuestras identidades finitas. Si inmediatamente dices la segunda parte del mantra Yo Soy, la mente piensa “YO SOY LO QUE YO SOY”.

Ser lo que realmente eres, es la esencia de la verdad y te guiará hacia la naturaleza de la realidad…”

Las palabras me habían resonado durante la práctica conjunta, pero al realizarla nuevamente, sentí que acomodó todas esas partes desparramadas y en fricción que hace meses se debaten.

Apareció en mi mente la frase de una película que me gusta, frase por la cual una de mis hermanas solía hacerme bromas… “Has el espacio y el vendrá “.

Hice espacio. Salte al vacío.

Decidí suspender una actividad, ya no solo internamente, ahí hacía tiempo que no vibraba, estaba desvitalizada y sin luz. Le puse palabras a la decisión, la comuniqué, y al sacarla y ponerla afuera, algo aflojo.

Al compartir mi decisión caían lágrimas. Apareció el alivio.

¿Será por esto de aflojar, ser congruente y responsabilizarme del camino que elegí hace tiempo? El que por la razón que sea, como a tantos otros que, al desconectar el corazón, en este hacer y hacer exitista la vida y el cuerpo duelen.

Respire y me quede ahí, conmigo. Me di cuenta que a veces todo no lo puedo. Y también entendí que hay elecciones del pasado que no palpitan con quien Soy e intento Ser.

Hoy el cuerpo no duele.

Hoy hice el espacio. Y ese vacío, en otro tiempo temido y flanqueado, hoy me invita a habitarlo y dejarme sorprender.

Respiro… inhalo y exhalo, tomo contacto con los latidos de mi corazón. Me emociona y trae paz.

Hoy, “YO SOY LO QUE YO SOY” y mis ojos brillan. Los espero la próxima semana en este mismo espacio…

Pero si desean que compartamos la semana juntos te invito a que sigas mis cuentas de Instagram en @paola.vincenti y @focu.self.