
En la bruma del destino, observo un sendero que se despliega ante ti en lo que resta del año. Las estrellas convergen en una danza misteriosa, indicando un período de cambios y transformaciones. Tu buena fortuna está entrelazada con tu capacidad de adaptación. La clave es abrazar la incertidumbre con valentía. Veo un viaje, físico o espiritual, que te llevará a nuevos horizontes, desvelando tesoros inesperados. Las relaciones serán el foco, y un antiguo lazo se fortalecerá. En el ámbito profesional, una oportunidad oculta se revelará. Tu determinación y apertura de mente serán tus aliados. La fortuna sonríe a quienes abrazan el cambio con gracia y sabiduría.