Registros Akáshicos: El libro del Alma

Hola! Mi nombre es Ana, y estoy aquí para compartir con Uds. algunas técnicas de sanación holística, ahondar en ellas, explorarlas, conectarlas entre ellas y contarles algunas experiencias en este espacio sencillamente llamado «Registros Akáshicos»

Desde muy chica me interesaron los temas metafísicos, pero la mayoría de las veces que llegaba a algún libro (en esa época, no tan remota, donde aún no existía internet) me daban miedo. Por lo que pasaron varios años donde solo leía de reojo algún que otro artículo, pero sin ahondar demasiado. Hasta que el stress del día a día, me golpeo y tuve que recurrir a alguna técnica que me ayudara a sobrellevar el ritmo de vida que “me había tocado”. Allí apareció el Reiki Usui, poderosa técnica que me ayudo mucho en mis agitados días. Pero con el tiempo no me alcanzó y de a poco fueron apareciendo otras técnicas, de las cuales me fui enamorando una a una. Es un largo camino, donde cada aprendizaje te abre una puertita, te deja ver un lado de este enorme e increíble universo energético del cual somos parte importante.

Una de las últimas técnicas de sanación a la que accedí, fue la de registros akáshicos. Nunca había escuchado este término, cuando una amiga me cuenta que fue a una sesión y salió maravillada. Como yo había sufrido un episodio de salud que me impactó mucho, me dió curiosidad y sin saber nada del tema, pedí una cita. Salí de allí siendo otra persona, estupefacta por las cosas que me contó la lectora de registros, y desde allí, no pude parar de buscar información y leer libros, y así también realicé el curso de lectora de registros y en este momento estoy terminando el perfeccionamiento para enseñar la técnica. Asique vayamos al grano:

Que son los registros akáshicos? Para entender de qué se trata esta técnica holística de sanación, primero hay que hablar de la filosofía de vida que trae consigo.

Si bien dentro de lo holístico es muy común hablar del alma, hay que dejar en claro que para los registros akáshicos, el alma es la base primordial de la existencia, es el principio y el fin, es la vida y la muerte, es el todo.

El “Akasha”, que en sanscrito significa éter o alma, es un espacio de energía cósmica que contiene toda la memoria del Universo desde el principio de los tiempos.

La vida que hoy vivimos, es solo una de las tantas que transita nuestra alma; incluso en esta misma vida, hay vidas paralelas que está viviendo nuestra alma.

Nuestra alma viene a la tierra en forma de humano a aprender lecciones, porque nuestra alma tiene que ascender, para ser perfecta, y la mejor escuela es la reencarnación. Cabe aclarar que alguna encarnaciones también las vivimos como animales o plantas, pero donde más aprendemos es viviendo como humanos.

Antes de nacer, nuestra alma decide qué va a aprender en esa vida que decidió vivir, decide con que grupo de almas vivirá e interactuará, que por lo general es el mismo grupo de almas, pero en diferentes roles. Decidirá también que experiencias vivirá para poder evolucionar. En esta elección la ayudan sus maestros ascendidos, sus guías y sus ángeles, almas que ya han evolucionado tanto que no necesitan reencarnar más, y ayudan a las almas que si lo necesitan, para lograr la evolución.  Todos nuestros guías, maestros y ángeles nos acompañan en la reencarnación, los podamos sentir o no y siempre desde el amor incondicional.  

Nuestra alma no olvida sus recuerdos, pero durante la vida terrenal, cuando esta reencarnada, normalmente no tiene acceso a ellos, si no es por medio de diferentes métodos de acceso, como ser una lectura de registros akáshicos o terapia de vidas pasadas.

A pesar de no recordar las vidas anteriores, nuestra alma trae consigo cierta información, y a veces, esta información es tan fuerte que produce en nosotros malestares o bloqueos. Si en alguna vida pasada  uno murió de alguna forma traumática, o si vivió eventos muy traumáticos , cuando en esta vida hay algún detonante que hace que el alma traiga el recuerdo del trauma, aunque no del hecho en sí, nos podemos enfermar o tener bloqueos que no entendemos de donde vienen. Muchas veces también tenemos miedos infundados, y muy probablemente vienen de esas otras vidas.

Y en que nos ayuda una lectura de registros akáshicos? Nos ayuda a entender; básicamente entender que algunos traumas no nos pertenecen, o no pertenecen a esta vida o reencarnación y que debemos dejarlos ir. Cuando uno se da cuenta y entiende que nuestra alma es inmortal, y que algunos episodios no pertenecen a esta encarnación, nos libera del mismo, y así dejamos de sufrir por cosas que no nos pertenecen, por lo menos, no a esta reencarnación.

Hacerse una lectura de registros akáshicos es acceder a la energía y el mensaje disponible en ese momento. No siempre obtenemos lo que vamos a buscar, pero siempre, el mensaje que recibamos será para nuestro más alto bien, y nos ayudará a comprender ciertas cosas y desbloquear otras.

En los próximos artículos, les contaré varias cosas importantes de las lecturas, hablaremos de vibración, de protección energética, de ángeles, de mensajes y muchas otras cosas que acompañan a esta maravillosa técnica que nos regala el universo, para ayudarnos en este camino que es nuestra vida terrenal.

Hasta el viernes que viene!

Con mucho amor,

Ana

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Embajadora Escuela Indira

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