Actualmente la palabra soltar está muy de moda. Te aconsejan soltar esa relación que te hace mal, solta ese viejo hábito, solta ese trabajo que tanto estrés te causa. Pero nadie habla de lo difícil que es soltar. Pretendemos que de la noche a la mañana nos podamos liberar de ataduras que desde hace años las tenemos y tal vez recién hoy nos damos cuenta de ello. No es posible dejar algo tan rápidamente sin haber pasado por el duelo correspondiente. Sin haber transitado el dolor que nos causa dejar algo que creíamos, en principio, que era bueno para nosotros.
Es cierto que el ser humano tiende a aferrarse mucho a todo lo que alguna vez nos causó un impacto positivo y, que a veces, demoramos en darnos cuenta de lo que nos está haciendo mal. O mejor dicho, de reconocerlo. Nos negamos mucho a ver una realidad diferente a lo que veníamos acostumbrados. Pero tarde o temprano, cuando estemos listos, cuando no queda más remedio, cuando la vida se nos está haciendo cuesta arriba, nos decidimos a soltar. Y es en esa decisión, genuina y sin retorno, que nuestra vida empieza a cambiar. Y empezamos a soltar aquello que nos estaba haciendo daño. Y nuestro futuro comienza a vislumbrarse de otra manera. Un futuro lleno de posibilidades y situaciones nuevas para vivir.
Tomémonos nuestro tiempo para dejar todo lo que no contribuye a nuestro bienestar y, cuando percibamos que ya no hay vuelta atrás, animémonos a soltar. Un mundo nuevo se nos abrirá ante nuestros ojos. Y no vale reprocharse por qué tardamos tanto en tomar la decisión. Cada uno a su tiempo y, con el miedo en un bolsillo y las ganas y esperanzas en el otro, caminemos hacia lo desconocido que nos espera. No hay dudas que será mucho más contributivo y mejor de lo que nos habíamos imaginado.
Les dejo a continuación un poema que refleja para nosotros lo que es soltar:
SOLTAR
Rendirse, es abandonar.
Soltar, es dulce liberar.
Rendirse, es llorar de angustia.
Soltar, la paz total.
Rendirse, es duro y difícil.
Soltar, es relajar.
Rendirse, es el fracaso.
Soltar, el éxito total.
Rendirse, es muy humano.
Soltar, la divinidad.
Rendirse, es el atardecer muriendo.
Soltar, es el sol naciendo.
Rendirse, todo ha terminado!
Soltar, todo acaba de empezar!
Suzanne Marshall Lucas
Que tengan un bendecido martes, te espero el próximo nuevamente en este espacio llamado «Palabras que Inspiran»
Brenda.
No dejes de seguirme en mi Instagram @parasanarelalma_bw
En la búsqueda de la felicidad y el éxito, es natural que nos encontremos buscando…
¿Te encuentras atravesando una situación difícil y no sabes si se resolverá a tu favor?…
La relación entre el dinero y la energía es un tema fascinante que ha intrigado…
¿Estás listo para conocer qué te depara el día según tu signo zodiacal? Nuestro Horóscopo…
Muchas veces nos ha pasado en la vida tener esa sensación de sentirnos perdidos, o…
Si te encuentras luchando por mejorar tu situación financiera y no sabes qué más hacer…
Esta web usa cookies.