Nuestra vida está regida por una fuerza poderosa e invisible que nos une a todos los seres humanos. Estamos hechos a imagen y semejanza de esta energía, y tenemos el mismo poder creador dentro nuestro. Consciente o inconscientemente vamos creando todas las circunstancias de nuestra vida.
Cierto es que aún teniendo la habilidad de moldear nuestra existencia, muchas veces, no logramos nuestros anhelos más profundos en el momento en que lo deseamos. E aquí el porque del título de este artículo: el tiempo de Dios es perfecto.
Dios/el universo/el gran espíritu vela siempre por nosotros y nuestro bienestar, entonces muchas veces nos dice que no a nuestros pedidos porque no estamos listos para recibirlos. Nunca vemos todas las posibilidades, la mente parlanchina suele nublar la visión de gran parte de la realidad y, entonces, no podemos saber que hubiese ocurrido , o no, si ese anhelo se hubiera concretado. Tal vez aquel deseo no venía del corazón sino del ego y, por ello, no nos fue cumplido o ,en el transcurso del tiempo, no nos haría felices o dañaríamos a alguien sin querer hacerlo.
Un viejo dicho nos dice que » si una puerta se cierra otra más grande se va a abrir» y de hecho es así, pero depende de nosotros ver las nuevas posibilidades y atrevernos a tomarlas.
Si nos quedamos enojados, tristes o quejumbrosos por lo que no fue difícilmente veamos lo nuevo que tenemos en frente. El universo nos trae lo correcto y perfecto, no siempre es lo que queremos para nuestra vida, pero si es lo que necesitamos en ese momento.
Si cambiamos la actitud con la que recibimos todo lo que nos rodea, si agradecemos por lo bueno que está por venir de antemano, el gran espíritu nos otorgará lo más grandioso e inimaginable para nuestra vida. Solamente hay que estar dispuesto a recibirlo.
Deseo de todo corazón que hayas disfrutado de este artículo y por cualquier duda o consulta que tengas te invito a que me sigas en mis redes sociales, en Instagram en @parasanarelalma_bw, por mi parte volvemos a encontrarnos el martes próximo en este mismo espacio.
Bendiciones
Genial tengo seis meses practicadolos
Gracias, totalmente de acuerdo muchas veces nos sentimos enojados o traicionados por Dios por hacer lo que le pedimos y nuestra necedad nos ciega. Lo cierto es que Dios siempre tiene lo mejor para todos sus hijos, así que a confiar y dejarnos guiar por nuestro Padre amado.
Muchas gracias Elba!
Bendiciones