Estoy muy feliz de darte la bienvenida a un nuevo artículo en mi espacio en el Blog de los Códigos Sagrados de Agesta.
¿Alguna vez le pediste a Dios/universo una señal para accionar de una forma determinada? ¿Haz preguntado al cosmos y aguardaste una respuesta respecto a un tema particular? Todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos solicitado asistencia al gran espíritu para la resolución de un problema o circunstancia que nos tenía preocupados y sin saber que decisión tomar o a que resolución llegar o cómo accionar. Suele suceder que, en los momentos cruciales o más significativos de nuestra existencia, solemos pedir asistencia al universo para tomar determinadas decisiones. Usualmente nos escucha y responde pero no somos capaces, y a veces no queremos, de interpretar o tomar conciencia de lo que nos quiere decir. ¿ Porqué sucede esto? Porque nos engañamos esperando una determinada resolución, que creemos la más conveniente y acertada, pero Dios en su infinita sabiduría, es quien realmente sabe lo que es correcto y perfecto para nuestras vidas.
Nos cuesta soltar la expectativa y nos aferramos al resultado que deseamos, sin vislumbrar que tal vez haya mejores y más contributivas posibilidades que no estamos teniendo en cuenta.
¿Cómo nos habla el universo? ¿ Cómo trata de comunicarse con nosotros? No de las maneras habituales, pero si de diversas y creativas formas. Una de ellas puede ser la letra de una canción que casualmente relata lo que estamos viviendo en ese momento; a través de las páginas de un libro abierto al azar, que contiene exactamente las palabras que necesitamos escuchar, o una película que, a través de sus diálogos, pareciera que nos está hablando directamente a nosotros.
Otra forma es mediante las personas que nos rodean o que nos cruzamos luego de lanzar la solicitud al universo. Puede venir la respuesta de un consejo de un amigo, una charla escuchada al pasar de gente desconocida o de la persona que menos esperamos. A veces nos habla a través de sueños o nos llegan susurros de conciencia en forma de pensamientos e ideas que antes no se nos habían ocurrido.
El alma nos habla de forma a veces simbólica y otras veces de manera directa y contundente. La respuesta siempre es la que, en el fondo del corazón, supimos que era la correcta, la que habíamos pensando en principio, pero nos resulta difícil seguir nuestro saber intrínseco e inequívoco.
Hoy los quiero invitar a que hagan la prueba, si necesitan un consejo o una guía para una situación que estén viviendo actualmente, demanden al gran espíritu una respuesta sobre la solución del inconveniente que los preocupe, y estén atentos y abiertos a recibir la respuesta de maneras inesperadas.
Como siempre estoy para ayudarte y compartir contigo cada día desde mis redes sociales, te invito a que visites mi Instagram en parasanarelalma_bw y deseo que hayas disfrutado de mi artículo en el Blog de los Códigos Sagrados de Agesta
Que tengan una bella semana.
Pienso y me ha ocurrido que he realizado peticiones a Dios/Universo cosas que luego me dan otra que en absoluto jamás pensaba que era lo más adecuado y favorable para mi …me ha pasado infinidades de veces y pienso que lo que consideraba que era lo deseado no lo era y comprendía y comprendo que no era el momento, ni era favorable lo solicitado…Hoy sé que todo lo que ocurre en nuestras vidas tienen un que y porqué…gracias por recordarlo.