las relaciones toxicas

Las relaciones tóxicas (3° Parte)

Te doy la bienvenida a esta tercera parte del artículo sobre las relaciones tóxicas aquí en el Blog de los Códigos Sagrados de Agesta.

Hoy quiero hacerte una pregunta, ¿Cómo se distingue una relación saludable?

Y ¿qué distingue, en cambio, a una relación saludable o satisfactoria, en una relación sana ambos miembros de la pareja cuidan mucho su vida personal: sus intereses, sus aficiones, sus inquietudes culturales.

La base del amor es que “una vida con sentido no depende más que de una misma”. Si luego te relacionas con alguien debe ser para estar mejor que cuando estabas solo ò sola”. Solamente tú tienes el poder de ser feliz.

Uno de los pilares básicos de ese “buen amor” del que habla, es la sensación de que “la danza relacional nos hace bien, nos potencia, genera más alegría que tristeza, más fuerza que debilidad, más bienestar corporal que malestar corporal”. ¿Y qué lo facilita? Para empezar, que ambos miembros de la pareja hayan revisado las pautas de conexión afectiva con sus padres: “Estar en paz con la familia de origen, si es posible, no tener muchos asuntos pendientes en esa área”.

Una buena relación también se reconoce porque nos dirige hacia el desarrollo y el crecimiento, nos da impulso y motivación. También porque “el intercambio de energía tiende a ser positivo y agradable: uno se experimenta al lado del otro relajado, sin exigencias, sin tensiones, sin miedos, con confianza; la energía está más proyectada hacia el futuro ‒proyectos, hijos‒ que hacia el pasado”. En una relación tóxica, en cambio, se mira mucho hacia atrás: a lo que dijimos, a lo que hicimos; y cada persona ocupa en ella un lugar determinado, rígido y poco flexible. No hay posibilidad de crecer dentro de ese espacio, y si lo intentamos, provocaremos seguro algún tipo de turbulencia emocional.

Otro elemento fundamental de una relación próspera consiste en darse reconocimiento: ver de verdad al otro, hacer el esfuerzo de prestarle atención y no darlo por sentado.

 “Una buena relación está viva y podemos ser quienes somos en cada momento, sin tener que encajar en guiones preestablecidos como por ejemplo el de que siempre tengo que ser el fuerte, o el débil, o el responsable”.

Espero que te haya sido útil y de tu agrado. Soy  Nancy Ramírez, y puedes encontrarme en @semillas.deluz ( Instagram)+54 1130893301 Argentina

Soy Terapeuta Holística Integral y Coach Ontológico, doy sesiones individuales, talleres y formaciones.

Limpiezas energéticas y procesos evolutivos. También soy terapeuta de Flores de Bach, un sistema que trabaja directamente sobre las emociones.

Mi especialidad  es educación y gestión de emociones con el propósito de lograr bienestar, salud y prosperidad en tu vida, como así también armonía en tus relaciones.

Gracias por acompañarme, hasta el final del artículo de hoy. Hasta el próximo miércoles. Desde este espacio llamado “El Arte de Vivir: Camino Al ser.» en el Blog de los Códigos Sagrados de Agesta.

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